Compromiso familiar 3: Beneficios del compromiso familiar

Compromiso Familiar 3 es el tercero de una serie de cinco partes. Los enlaces a los otros segmentos están abajo.

Beneficios del compromiso familiar

Entonces, si la educación sexual puede ser un tema controvertido, ¿por qué molestarse? ¿Por qué las escuelas no dejan de impartir educación sexual para evitar la controversia? ¿Por qué es importante colaborar con los padres y cuidadores en la enseñanza de la educación sexual?

Bueno, en primer lugar, la educación sexual no es tan controvertida como podría pensarse. De hecho, la mayoría de los padres (80-93%) apoyan una educación sexual integral, médicamente precisa y adecuada a la edad. Los padres afirman que confían en las escuelas para complementar sus conversaciones en casa sobre la pubertad, las relaciones y la sexualidad. La mayoría de los padres afirman que quieren que se enseñen más temas y que se dedique más tiempo a la educación sexual de lo que suelen hacer los colegios.

Las escuelas siguen comprometidas con la enseñanza de la educación sexual porque saben que lo mejor para los adolescentes es recibir una instrucción que les ayude a mantenerse seguros y sanos durante sus años escolares y hasta la edad adulta. Aunque sólo 30 estados y el Distrito de Columbia exigen la educación sexual en las escuelas públicas, la mayoría de las escuelas la imparten. Lo hacen porque la educación sexual promueve las relaciones sanas, el aprendizaje social y emocional, la apreciación de la diversidad sexual, la comprensión del género y la alfabetización mediática. También previene el abuso sexual infantil y la violencia en las citas y en la pareja.

La asociación entre las escuelas y los padres/cuidadores amplía los beneficios de la educación sexual. Los padres son la principal fuente de educación sexual de los niños. Sin embargo, muchos padres no cumplen ese papel porque carecen de los conocimientos, las habilidades y/o la comodidad para enseñar a sus hijos. Las asociaciones entre el hogar y la escuela pueden empoderar y animar a los padres proporcionándoles herramientas para que se sientan más competentes y cómodos hablando de sexualidad con sus hijos y adolescentes.

Cuando los padres se dedican a la educación sexual en casa, las investigaciones muestran varios resultados positivos:

Los padres influyen en los comportamientos sexuales de los hijos, incluido el uso del preservativo, el momento de la iniciación sexual y las circunstancias de la misma.
La supervisión de los padres influye en las actividades sexuales de los adolescentes.
Los padres pueden modelar una comunicación abierta y respetuosa sobre el sexo.
Los padres ejercen una influencia sustancial en las actitudes, valores y creencias de los niños.

Con todos los beneficios del compromiso familiar en relación con la educación sexual, los centros escolares hacen bien en forjar una sólida asociación entre el hogar y la escuela que mantenga a los niños y adolescentes seguros y sanos.