Durante la pubertad, el cuerpo de tu hijo cambia a un ritmo más rápido que en cualquier otro momento de su vida, salvo en la infancia. Esto ocurre cuando su cuerpo produce nuevas hormonas que le indican que debe convertirse en adulto. Estos cambios crean la necesidad de nuevos hábitos de higiene durante la pubertad. Revisaremos qué prácticas de higiene personal son necesarias durante la pubertad y proporcionaremos algunos antecedentes y contexto para que sea más fácil educar a tus hijos.
Tu hijo no sabrá cómo cuidar su nuevo cuerpo a menos que tú se lo enseñes. Empieza estas lecciones pronto, en torno a los 10 años, para asegurarte de que han adquirido unos hábitos de higiene personal que les ayudarán a estar preparados para todos los cambios que se avecinan. En primer lugar, hagamos un breve repaso tanto de la pubertad como de la higiene.
¿Qué es la pubertad?
La pubertad es el momento en que los niños se convierten en adultos. Dura entre dos y cinco años, normalmente entre los 9 y los 14 años en el caso de las niñas y entre los 11 y los 16 años en el caso de los niños. Sin embargo, cada niño es único, por lo que la pubertad puede empezar antes o después. La pubertad la desencadenan las hormonas, los mensajeros químicos del cuerpo.
¿Qué es la higiene?
La higiene (hi-jeen) es la práctica de mantener las cosas limpias y sanas.
La higiene personal es la práctica de mantener el cuerpo limpio y sano.
Hábitos de higiene personal para enseñar
Hábitos de cuidado de la piel
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y tiene muchas funciones. La piel protege al cuerpo de las infecciones manteniendo los gérmenes fuera. Produce aceite y mantiene el agua en su interior para que no nos sequemos. La piel regula la temperatura de nuestro cuerpo mediante el sudor.
Glándulas de aceite
La piel tiene glándulas sebáceas que evitan que la piel y el pelo se sequen. Durante la pubertad, las hormonas ordenan a las glándulas sebáceas que produzcan más sebo. El sebo puede obstruir los poros de la piel y causar acné, lo que exige nuevos hábitos de higiene personal. El acné es uno de los problemas más notables durante la pubertad; también se le llama granos, espinillas, puntos negros o imperfecciones. Suele aparecer en la piel de la cara, el cuello, la espalda, la parte superior del pecho y los hombros.
He aquí algunas formas de cuidar la piel grasa:
Lava la zona dos veces al día. Utilice una toalla suave, agua tibia y un jabón o limpiador suave. No frote.
Utiliza sólo maquillaje sin aceite, protector solar y cremas hidratantes. Desmaquíllate todas las noches.
Evita picar, reventar o apretar los granos. Esto puede provocar cicatrices e infecciones.
Utiliza jabones y cremas especiales para tratar el acné.
Cambia la funda de tu almohada cada pocos días para que tu cara descanse sobre una almohada limpia y libre de aceites cada noche.
Mantener el cabello graso fuera de la cara.
Acude a un profesional sanitario si el acné empeora.
Glándulas sudoríparas
El sudor es producido por las glándulas sudoríparas de nuestra piel. El sudor no huele mal hasta que se mezcla con las bacterias. Entonces... ¡cuidado!
Nuestro cuerpo tiene dos tipos de glándulas sudoríparas:
Las glándulas sudoríparas ecrinas están por todo el cuerpo. Regulan la temperatura corporal. Cuando tenemos calor, liberan agua. Cuando esa agua se evapora, nos enfría.
Las glándulas sudoríparas apocrinas se encuentran en las axilas y los genitales. Se activan durante la pubertad. Cuando el sudor de estas glándulas se combina con las bacterias, se produce el olor corporal.
Antes de la pubertad, los cuerpos no huelen mal, pero una vez que el cuerpo comienza la pubertad eso cambia. De hecho, el olor corporal es una señal temprana de que alguien está empezando la pubertad. Tu hijo necesitará nuevos hábitos de higiene, o nadie querrá estar cerca de él. He aquí algunos hábitos que ayudan:
Dúchate o báñate todos los días. Con la piel seca, lávate cada dos días. Utiliza jabón y una toalla. Empieza por arriba y baja. Lava las partes más limpias antes que las más sucias (la parte inferior y los pies). Después de enjabonarte, aclara con agua tibia.
Seque el cuerpo dando palmaditas o frotando suavemente. Asegúrese de secar entre los dedos de los pies para evitar que los pies apesten.
Utiliza un antitranspirante para reducir la sudoración de las axilas. Lo mejor es aplicarlo en las axilas limpias y secas antes de acostarse cada noche.
Utilice un desodorante para reducir el olor de las axilas. Aplíquelo todos los días en las axilas limpias y secas.
Llevar ropa limpia todos los días. Cambia los calcetines y la ropa interior a diario. Si la ropa huele mal, nosotros olemos mal.
Lavar y secar los pies con cuidado. Utilizar calcetines limpios, secos y de algodón. Use zapatos secos hechos de materiales naturales.
Color de la piel
El color de la piel es parte de lo que hace que cada persona sea única. La piel tiene un pigmento que da a cada persona su color de piel. El principal pigmento se llama melanina. Cuanta más melanina haya en la piel, más oscuro será el color de la piel de una persona. El pigmento de la piel nos protege del sol. Pero necesitamos proteger nuestra piel aún más.
Utiliza un protector solar para evitar las quemaduras solares, el cáncer y el envejecimiento de la piel. Lee las etiquetas. Busque tres cosas cuando seleccione un protector solar:
De amplio espectro: La luz solar tiene dos tipos de rayos que pueden causar cáncer de piel, envejecimiento de la piel y quemaduras solares, los UVA y los UVB. Elige un protector solar que diga que es de amplio espectro para bloquear ambos.
Factor de protección solar: Los protectores solares filtran los rayos nocivos del sol y se miden en factor de protección solar o FPS. Cuanto más proteja del sol, mayor será el número de FPS. Utiliza un protector solar que diga FPS 30 o más.
Resistente al agua: Los protectores solares que dicen ser resistentes al agua deben decir si duran 40 u 80 minutos mientras nadamos o sudamos. Ningún protector solar es resistente al agua, por lo que hay que reaplicarlo al menos cada dos horas... o más a menudo si nos mojamos.
He aquí algunos hábitos que ayudan:
Use ropa protectora, incluyendo un sombrero y gafas de sol que bloqueen la luz ultravioleta.
Evite el sol cuando sus rayos son más fuertes, entre las 10 y las 16 horas.
Evita las camas de bronceado y las lámparas solares. Dañan la piel y pueden provocar cáncer de piel.
Hábitos de cuidado del cabello
El pelo crece constantemente. Un pelo vive de dos a siete años; luego, se cae y crece uno nuevo. Con buenos hábitos de higiene, podemos cuidar bien nuestro cabello, para que esté sano todos esos años.
Cabello del cuero cabelludo
La piel de la parte superior de la cabeza se llama cuero cabelludo. Le crece pelo y tiene glándulas sebáceas. Otra cosa que le ocurre al cuerpo durante la pubertad es que estas glándulas sebáceas pueden producir más grasa y engrasar el pelo. Aquí tienes algunos consejos para el cuidado del cuero cabelludo y el cabello:
Conoce el tipo de cabello. El pelo liso tiende a ser más graso; el pelo rizado tiende a ser más seco.
Lávate el pelo cada uno o siete días, dependiendo de lo seco o graso que esté.
Utiliza un champú suave para lavar el cabello con delicadeza. Aclare todo el champú al terminar.
Evita utilizar productos químicos agresivos en el cabello. Pueden resecar el cabello y volverlo quebradizo. El pelo seco se rompe más fácilmente.
Pide ayuda a un adulto de confianza si el cuero cabelludo pica o se descama, o para hacer preguntas.
Vello corporal
Durante la pubertad, el vello empieza a crecer más grueso y en nuevos lugares. En primer lugar, su hijo notará que le crece un vello fino alrededor de los genitales. Son los llamados vellos púbicos. Con el tiempo, estos pelos se vuelven más gruesos y oscuros. Más tarde, el vello crece en las axilas, en los brazos y las piernas, en la cara y en el pecho. Sólo hay dos lugares en los que no crece vello: las palmas de las manos y las plantas de los pies. La cantidad de vello corporal varía mucho de una persona a otra. Aquí tienes algunos consejos para el cuidado del vello corporal:
Las personas pueden dejar su vello corporal al natural, o pueden decidir recortarlo o eliminarlo. Se trata de una elección personal, ya que no es más saludable en ambos casos.
Pide consejo a tus padres o a otro adulto de confianza.
El afeitado es una forma de eliminar el vello no deseado. Se realiza con una maquinilla de afeitar o una afeitadora eléctrica. Un adulto de confianza puede mostrar cómo se afeita antes de que el niño lo intente.
El vello también puede eliminarse mediante la depilación, la cera o la aplicación de depilatorios (una crema que disuelve el vello).
Hábitos de cuidado de las uñas
Las uñas de las manos y de los pies protegen las puntas de los dedos. Las uñas también nos ayudan a coger objetos pequeños. Nuestras uñas crecen constantemente. Eso significa que necesitaremos hábitos de higiene para cuidarlas durante toda la vida.
Uñas
Estos son los consejos para el cuidado de las uñas:
Mantenga las manos y las uñas limpias. Lávese las manos antes y después de comer, después de ir al baño, después de estornudar o toser en la mano y siempre que esté sucio.
Corta las uñas cada una o dos semanas. Córtalas en línea recta. Después, redondéalas en una pequeña curva. Utiliza tijeras de manicura, cortaúñas y/o lima de uñas.
Recorte los padrastros con maquinilla o tijeras pequeñas. No los muerda ni tire de ellos. Los padrastros son pequeños trozos de piel junto a la uña.
Usa loción para las manos y frótala también en las uñas.
Evite morderse las uñas. Evite hurgarse o tirar de los padrastros.
Limitar el uso de quitaesmalte; reseca la uña.
Uñas de los pies
Estos son los consejos para el cuidado de las uñas de los pies:
Mantenga limpios los pies y las uñas de los pies. Lávelos a diario, especialmente entre los dedos. Secar los pies, especialmente entre los dedos.
Ponga loción en los pies, especialmente en los talones. No ponga loción en los dedos de los pies ni entre ellos. Esto puede causar hongos.
Recorte las uñas de los pies cada dos semanas o cuando sea necesario. Córtelas en línea recta. No las redondees. No las cortes demasiado cortas. Esto puede provocar la aparición de uñas encarnadas.
Lo más fácil es recortar las uñas de los pies justo después de la ducha o el baño, mientras están blandas.
Mantenga los pies secos usando calcetines de algodón y zapatos secos.
Evite cortar las uñas de los pies demasiado cortas o en curva. Evite compartir los zapatos. Evitar el uso de zapatos apretados.
Habla con un adulto de confianza si los pies te pican, o las uñas de los pies parecen gruesas o tienen un color diferente.
Hábitos de cuidado de la boca
La boca es el punto de entrada de alimentos, bebidas y gérmenes. Mantener la boca limpia y sana es importante para la salud de toda la vida. He aquí algunos consejos para el cuidado de la boca:
Cepille los dientes durante dos minutos, dos veces al día, por la mañana y justo antes de acostarse. Utiliza una cantidad de pasta dentífrica con flúor del tamaño de un guisante.
Limpie entre los dientes una vez al día. La limpieza interdental llega a los lugares que no alcanza el cepillo de dientes. Puede hacerse con hilo dental, cepillos interdentales, irrigadores bucales y palillos de madera.
Sigue una dieta saludable que limite los alimentos y bebidas azucarados.
Visita al dentista con regularidad.
Hábitos de cuidado personal
Cuando su hijo llegue a la pubertad, empezará a menstruar o a tener emisiones nocturnas. Puedes ayudar a tu hijo a gestionar estos ritos de paso hablando de ellos antes de que se produzcan. Aquí tienes consejos para el cuidado personal:
Explique a su hija la menstruación (regla). Proporciónale productos menstruales y explícale cómo utilizarlos. Hable de la frecuencia con la que hay que cambiarlos, de cómo deshacerse de ellos y de cómo limpiar la vulva de delante a atrás para evitar infecciones.
Explique a su hijo las emisiones nocturnas (sueños húmedos). Enséñale a lavarse y a cambiar las sábanas húmedas. Asegure a su hijo que esto es una parte típica de la pubertad y que es diferente a mojar la cama.
Hable del placer y la masturbación con su hijo. Explíquele que la auto-masturbación es una actividad que se realiza en privado.
Espere que su hijo quiera más privacidad y tiempo en el baño. Hable de las normas familiares sobre el uso compartido del baño y de la importancia de pedir el consentimiento antes de entrar en un espacio privado, como el baño o el dormitorio.
Resumen...
Como padre, cuidador u otro adulto de confianza, te animamos a que enseñes a tu hijo sobre su higiene personal. Al fin y al cabo, usted los conoce mejor que nadie.
Los hábitos de higiene personal son una forma de que tu hijo desarrolle su responsabilidad. Considere la posibilidad de crear una tabla de higiene personal para ayudar a su hijo a recordar lo que debe hacer. Recompense su éxito cuando demuestre que es responsable.
Mensajes clave:
Recuerda: sólo tienes un cuerpo, así que trátalo bien.
Tu cuerpo te pertenece.
Cada persona es única, Y todos somos iguales.
Todos acabamos siendo adultos en nuestro tiempo.
Nadie te mira tan de cerca como tú; nadie más se dará cuenta de las pequeñas cosas que ves en el espejo.
Estar limpio sienta bien.
Cuando sabes cómo cuidarte, te sientes bien contigo mismo.
Siempre puedes hablar conmigo o con otro adulto de confianza.